Ser servil no te da más trabajo
De cómo el ingenioso youtuber aprendió que ser amable no es lo mismo que arrodillarse.
No sé si es cosa del triatlón.
O de los nichos.
O del carácter.
Pero últimamente veo demasiado servilismo en mi gremio.
(Que casi mejor para mí, las cosas como son)
Gente haciendo la pelota como si se jugase el sueldo cada vez que alguien les contesta un WhatsApp.
Como si conseguir una entrevista fuese un acto heroico.
Como si tener acceso a un profesional del sector les convirtiera automáticamente en fans.
Y no lo entiendo.
Porque, además, aquí está el punto clave: la mayoría de los PROs son encantadores. Atentos. Accesibles. Te lo ponen fácil. El 95% de las veces, trabajar con ellos es un gusto. Te ayudan. Te responden. Colaboran.
Y sin embargo, veo a algunos que, en lugar de tratar desde la naturalidad, desde la igualdad profesional, lo hacen desde la reverencia. Desde la alfombra. Como si estuviesen ante una figura inalcanzable. Como si estuviesen agradeciendo un milagro.
Que les contestan un mensaje y ya están escribiendo como si fueran becario en la NASA.
Y ojo: esto no va de ser borde.
Va de entender que una cosa es ser profesional.
Y otra, muy distinta, arrodillarte.
Ser educado no es rendir culto.
Ser agradecido no es sobreactuar.
Y trabajar con respeto no significa escribir con reverencia.
Una marca, sea grande o pequeña, no te está haciendo un favor cuando te atiende.
Está haciendo su trabajo. Igual que tú el tuyo.
Y esto sirve también para la vida.
Ser simpático no implica ser sumiso.
Ser humilde no es ir por ahí agachando la cabeza.
Y tener admiración por alguien no significa convertirte en un alfombrilla de ratón con patas.
El respeto se demuestra trabajando bien.
No diciendo que sí a todo.
No aplaudiendo sin pensar.
No tragando con lo que no toca por si acaso mañana no te contestan.
Porque si tienes que mendigar atención para poder hacer tu trabajo, entonces no estás trabajando.
Estás rogando.
Y eso no es profesionalidad.
Es servidumbre.
Tacatá.
Hale, circulen.
Y lean mi ebook.
Diego Rodríguez escucha 4TO 23 de Aitana.
Diego Rodríguez ha comido hoy muslo de pollo al horno.
Diego Rodríguez sueña con la bici de esta tarde.